1. Disfrute de la luz natural
Durante el día evitar encender las luces y aprovechar la luz natural abriendo bien las ventanas y persianas. Durante el invierno la entrada de la luz del sol ayudará a calentar la casa, práctica que debe evitarse en verano en las horas de mayor calor, ya que hará que la casa sea más cálida y aumentará las necesidades de refrigeración.
2. Instale bombillas LED
Las lámparas LED son doblemente ventajosas: duran mucho más tiempo, alcanzando una media de 9 años, mientras que las lámparas tradicionales apenas superan los 1 año y medio, lo que te ahorrará algo de dinero con lámparas; y seguir consumiendo menos energía para dar la misma intensidad lumínica.
Otro de los cuidados a tener es pensar si realmente necesitas todas las lámparas que tienes instaladas. El hecho de que tenga rodamientos en el techo no significa que haya tenido que usarlos todos, así que tenga una actitud crítica y piense que cada bombilla eliminada es más una contribución al ahorro.
3. Desenchufe los aparatos eléctricos de la
No dejar los aparatos eléctricos en espera es un buen principio para no desperdiciar más energía, pero ¿sabías que los electrodomésticos que incluso sólo están conectados a la corriente ya están consumiendo energía? Por lo tanto, en todos los equipos que no necesitan estar en funcionamiento continuo, la mejor opción es incluso desenchufarlos. Una buena inversión pueden ser las extensiones con interruptores, con sólo pulsar el botón para apagar la corriente eléctrica.
4. Aproveche las tarifas de dos horas
Este consejo es parte de Coopérnico, la única cooperativa de energía renovable del país, que dice que cambiar el contrato a una tarifa de dos horas y tratar de centrarse en un mayor consumo de energía en el período vacío puede generar ahorros en las facturas de electricidad y reducir las emisiones de carbono. La razón es que en el período vacío corresponde al período en que la producción de energía eólica es más intensa y hay una reducción en la producción de energía a partir de fuentes fósiles.
5. Utilice bien los electrodomésticos de cocina
Los electrodomésticos son importantes fuentes de consumo, especialmente los ubicados en la cocina. Por lo tanto, hay algunos cuidados que es importante tener en cuenta para asegurarse de que no gaste más energía de la necesaria:
• No abuse del uso del horno y al usarlo evite abrirlo varias veces para no bajar la temperatura y obligar a un mayor consumo a recalentarse;
• Apague la estufa unos minutos antes de preparar el alimento, aprovechando el calor residual acumulado en el recipiente;
• Evite abrir el refrigerador con demasiada frecuencia porque implica un esfuerzo de refrigeración adicional, gastando más energía:
• Alejar el refrigerador de las fuentes de calor y moverlo a 10 cm de distancia de la pared;
• Lavar la ropa y los platos sólo con carga completa, para reducir el número de gastos de energía innecesarios;
• Lave la ropa y los platos en agua fría siempre que sea posible
Prueba estos consejos y verás que notarás los efectos en tus facturas de electricidad, con el bono de preservar el medio ambiente y contribuir a un cambio que depende de cada uno de nosotros.
En blog CreditoaHabitacao.com